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Consideraciones en la polinización con abejas.

02 de September de 2022 | Por Equipo AgroMatch

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Es cierto que la polinización se ve mejorada con creces bajo la presencia de abejas en el huerto, sin embargo, no basta ver una cierta cantidad de cajas instaladas en el huerto: lo relevante es contar con un número importante de abejas polinizando activamente. Por lo cual, la calidad y actividad de las colmenas además de su mantención depende tanto del apicultor como del fruticultor. Desde hace algún tiempo los apicultores han estado proponiendo un mejor pago por los servicios de polinización. Para contar con colmenas de calidad, se debe incurrir en gastos de alimentación invernal. Además, se requiere financiar el control de las enfermedades y plagas, así como implementar los acuerdos de producción limpia.

1. ¿Cómo distinguir buenas colmenas?

Tenemos claros los beneficios: mejorar cuaja, calibre, calidad de fruta, entre otros., para lo cual necesitamos tener la cantidad suficiente de abejas para lograr esos objetivos.
Cabe mencionar la relación directa que existe entre el número de marcos de la colmena con la cantidad de polen que recolecta, puesto que el número de abejas pecoreadoras es mayor. Por otra parte, mientras más crías haya al interior de la colmena, mayor demanda existirá de polen y de carbohidratos aportados por el néctar, y por lo tanto las pecoreadoras estarán más activas.


Por lo tanto, al recibir las colmenas en el predio conviene revisar los marcos junto con el proveedor del servicio y verificar los siguientes elementos:


–Cantidad de abejas pecoreadoras, en edad de colectar.
–Número de crías abiertas suficiente para estimular a las pecoreadoras.
–Reina en activa postura, que da origen a los huevos y las crías.
–Colonias sanas y fuertes.


2. ¿Qué información nos debiera entregar el apicultor?

El apicultor debería entregarnos información sobre el plan de tratamientos que se han hecho durante el invierno, así como los programas de higiene y limpieza. Las colmenas tienen que estar libres de enfermedades como Varroa, Nosema y Loque.

En invierno conviene visitar el apiario donde se van a contratar los servicios, observar la calidad de los cajones, y ver que las cámaras estén protegidas contra las lluvias, limpias, en lugares donde les dé sol, libres de corrientes de aire, sin contacto con malezas. Vale la pena consultar por la alimentación (tipo y frecuencia).


3. ¿És importante un transporte programado y cuidadoso de las colmenas?

La respuesta es un rotundo “si”, pues un estrés importante en el traslado provoca que las abejas demoren 3 a 4 días en empezar a trabajar, un período perdido, al cabo del cual un porcentaje de las flores puede dejar de estar receptiva.

Se recomienda evitar la plena luz del día, dejando el camión cargado en la noche para salir temprano en la mañana con destino a los huertos. En ellos el acceso debe estar previamente coordinado y tener listas las estructuras de instalación del apiario. Los caminos han de permitir el acceso directo del vehículo hasta el sitio final. El uso de tractores y colosos en caminos malos es un factor de retardo de entrada en actividad de las abejas.


4. ¿Influye la ubicación de los apiarios?

Actualmente se prefiere agruparlas de a 20, 30 ó 40, en lugares abiertos en el perímetro del huerto. Así se genera una concentración de las feromonas que incitan a trabajar a las forrajeras. El apiario queda menos expuesto al paso de maquinaria entre las hileras. Además resulta fácilmente visible, por lo cual las abejas pierden menos tiempo buscando su cajón, se dispone además de un buen espacio como “cancha de despegue y aterrizaje”, y recibe la mayor cantidad de sol durante el día para un máximo horario de trabajo. Las colmenas se ubican mirando hacia el norte. Se recomienda que los apiarios se ubiquen equidistantes para lograr una cobertura pareja.


Se debe evitar el contacto de las colmenas con la tierra, dada la humedad que puede traspasar generando problemas sanitarios. Por tanto, se deben instalar sobre caballetes u otro tipo de soporte, protegidas del viento ya que su enfriamiento dificulta la llegada de las abejas.


Por último, instalarlas en zonas libres o con baja población de malezas que resulten ser más atractivas para las abejas que el cultivo objetivo.


5. Prácticas de bajo impacto para una eficiente polinización.

Ya efectuada la instalación, el agricultor debe prevenir los impactos perjudiciales de ciertos trabajos, moviendo por ejemplo los tractores y equipos sólo en las horas en que las colmenas no estén en actividad.
Durante la polinización no se puede hacer aplicaciones de productos nocivos para las abejas. Sin embargo, aun usando productos inocuos, hay que tratar de aplicarlos antes de la instalación de las colmenas o después de su retiro.


Si la aplicación es ineludible, el fruticultor tiene que conversar con el apicultor sobre los productos a utilizar, los horarios y la forma de hacerlo.
Las abejas necesitan agua limpia. Es deseable suspender la aplicación de fertilizantes a través del riego durante la estadía del apiario, sobre todo en zonas sin mucho rocío en las mañanas y en donde las altas temperaturas llevan a las abejas a surtirse del riego y contaminarse.


6. Acompañamiento al encargado del campo

El apicultor tiene varias tareas, más allá de suministrar buenas colmenas. En frutales de menor tiempo de polinización, como manzano o kiwi, la colmena debe ir preparada para resistir una floración de alrededor de 10 días sin bloquearse.

En especies de requerimientos prolongados, como almendro, cerezo, peral y sobre todo palto y semilleros, se propone un manejo o más: Se pueden llenar marcos de miel, por lo tanto, la abeja reina no tiene sitio para poner sus huevos. Entonces hay que abrir espacio de manera que siga el desarrollo de la colmena. En casos extremos de abundancia se producen enjambrazones y se ha llegado a tener que cambiar colmenas. A la inversa, una baja disponibilidad de flores hará necesario alimentar y reforzar la colmena.


Estos manejos mencionados debieran aparecer en el contrato para que el dueño del campo vea que está acompañado en el servicio que contrató. En cuanto a los días de prestación de servicio, es bueno considerar cláusulas de flexibilidad, acordando lo que se hará si factores como el clima hacen variar la duración.


Al final del proceso, después de la cosecha del huerto, conviene que fruticultor y apicultor se reúnan para ver los resultados y ver que aspectos son mejorables.

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